Unos niños se divierten de lo lindo en una playa artificial en la delegación Iztapalapa de la Ciudad de México, mientras que, en ésa misma delegación, decenas de familias duermen en la calle, esperando a que se les diga qué va a ser de sus propiedades encautadas.
En otro lado, el cardenal Norberto Rivera anuncia que se excomulgará a todos aquellos que apoyen la despenalización del aborto en México. Al mismo tiempo, encabeza las celebraciones de semana santa en la Ciudad de México.
Pasamos a otra escena. En ella, el presidente de Irán anuncia la liberación de los soldados británicos que, supuestamente, se encontraban en aguas iraníes sin autorización. En Estados Unidos, el presidente Bush veta la ley que permitiría a miles de soldados norteamericanos regresar de Iraq ahora que ya no hay más guerra por allá.
Hagamos una edición rápida y regresemos al pasado. No mucho. El "presidente" Calderón (el peloncito, chaparrito, de lentes) se la pasa diciendo por todos lados que la seguridad de México y de sus ciudadanos es una de las prioridades de su gobierno. Comienza una "guerra" contra el crimen organizado (que, por cierto, aún no entrega cuentas claras) y presenta al ejército como su mejor aliado (¿alguien dijo golpe de estado?). Poco después, cuando su homónimo estadounidense viene de paseo a la península de Yucatán, manda establecer murallas anti-manifestantes, para evitar, claro, que los globalifóbicos le hagan algo a San Bush y a su perro.
¿Qué podemos deducir de todo ésto? ¿Qué hace un ser humano común y corrioso ante información tan encontrada? ¿Qué hacemos con todos ésos dobles discursos y ésa hipocresía que parece estar gobernando, ya no digamos a México, sino al mundo entero?
Digo, ya es el colmo que Calderón prefiera proteger a Bush de los mexicanos que a los propios mexicanos. Que me disculpe el cabrón, pero democracia no creo que signifique que se levante un cerco alrededor de la zona hotelera de Yucatán ni que anden unos Black Hawks sobrevolando el espacio aéreo nacional. Si fuéramos Irán, éste ya sería un pinche asunto diplomático encabronado. Pero no... somos México... mejiquito.
Y ahí andaban los diputados del PAN (Partido Acción Nacional, el actual partido gobernante en México) "tomando muestras" en una de las playas artificiales que el gobierno de la ciudad construyó recientemente. No estaban para ver por el bien de la gente que se estaba divirtiendo, sino para desacreditar una obra pública del partido contrario (el PRD, Partido de la Revolución Democrática). Finalmente, los políticos sacan el cobre y muestran que no son otra cosa que un grupo de viejas revoltosas esperando a ver a qué hora se pueden chingar entre ellos.
Y, como dije al principio, también ahí está Ebrard (el jefe de gobierno capitalino) haciéndose el héroe con las clases trabajadoras, dándoles 5 playas para disfrutar sin salir de viaje, mientras, por el otro lado, ha dejado a familias enteras sin patrimonio con el pretexto de combatir el crimen organizado.
Y es que es éso lo que les da poder para joderse a quién se les de la gana. Las ejecuciones en Acapulco, el tráfico de armas en Tepito, el robo de autopartes en la colonia Doctores... todo está ahí para justificar un conjunto de actos que, si nos pusiéramos bien las pilas, no podríamos llamar mas que fascistas.
Pero, en mi opinión, la hipocresía más aberrante es la que rodea a la religión. La mayoría de los criminales mexicanos son devotos de la santa muerte, se encomiendan a ella, le rezan, le hacen mandas y después salen a la calle a balear a algún cabrón, sabiendo que tienen de su lado una fuerza divina. Igual los políticos: se chingan a la gente de las maneras más imaginativas, sabiendo que el domingo pueden ir a la iglesia, comulgar y expiar todos sus pecados.
Y qué chingón que todos los que apoyamos el aborto y los que lo practiquen y a las que se lo practiquen vamos a quedar excomulgados. ¿Por qué no excomulgar también a los ladrones, los asesinos, los violadores, los contrabandistas, los políticos corruptos, los capos de la mafia, los que tiran basura en la calle, los que se pasan los altos, los que no caminamos sobre la banqueta, etc? ¿Ya no conviene, verdad?
Me pregunto cuántas mujeres mueren al año debido a que, en la desesperación, acuden a realizarse abortos clandestinos. Todas las mujeres tienen derecho a decidir qué hacer con su cuerpo. ¿Están matando una nueva vida? Sin duda, pero puede ser que ésa nueva vida sea producto de una violación o que la futura madre todavía no acabe ni la secundaria o qué sé yo. Los políticos y los religiosos (que hoy en día se parecen mucho) siempre ven las cosas de manera muy simple, cuando en realidad son mucho más complejas de lo que uno se imagina.
Hace no mucho tiempo escuché que se estaba distribuyendo de distintas maneras una propaganda que anunciaba un estudio que, supuestamente, demostraba la inexistencia del SIDA. Muchísimas personas alrededor del mundo han dejado sus tratamientos esperando una mejor calidad de vida. Me pregunto yo qué oscuro objetivo tendrá un estudio de ésa naturaleza, pero ése será tema de otra reflexión.
Y ahora: ¡¡¡NINE INCH NAILS!!! De su nuevo y próximo a aparecer Year Zero, tenemos tres tracks. El primero recuerda un poco a su canción Closer y el segundo a La Mer. El tercero va por cuenta mía, porque me parece la mejor canción del álbum. Ahora les toca a ustedes no ser hipócritas y reconocer que cualquier música que no provenga de la banda indie de moda simplemente no les interesa.
MP3: Nine Inch Nails - God Given
MP3: Nine Inch Nails - Another Version of the Truth
MP3: Nine Inch Nails - The Good Soldier
Todos los tracks del nuevo álbum, aquí. Esperen pronto una reseña del disco en éste blog.
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