Escuchando a las emociones: Nada

MP3: Cahuenga - Nada

Hasta adonde voy
sin saber quién soy
Hasta adonde voy
sin saber...

Vuelvo a oir tu voz,
siento tu calor
Vuelvo a oir tu voz
vuelvo...

Ahora puedo ver el sol
que me está quemando
pero me voy...
pero me voy...

Algo se quebró
para estar mejor
Entre el miedo y el dolor...

Acercándonos,
alejándonos
Sigo sin saber
adonde voy...

Todo se ha ido, menos vos
En medio del vacío
Siento tu voz...
Veo tu voz...

Ahora puedo ver el sol
que me está quemando
pero me voy...
pero me voy...

Nada cambiará...
a menos que vuelvas...

Es difícil describir el vacío que nos deja una persona cuando se va. Podría parecer que se trata de algo que nos hace mejorar como personas y los demás nos dirán cuán importante es que aprendamos de lo que pasó. Pero, ¿aprender qué? ¿Acaso debo aprender a sentir éste vacío por siempre?

Lo gracioso, como dice un amigo, es que uno no sabe por qué el vacío se siente en el pecho. Los científicos coinciden en que el punto en el que se generan la mayoría de los sentimientos es en el estómago, así que, ¿por qué siente uno como si le hubiesen disparado una bala de cañón en el pecho?

¿De dónde viene ése vacío? En realidad no nos han quitado nada. En realidad, fisiológicamente hablando, al menos, somos exactamente las mismas personas que antes. No es que nos quiten un brazo, un pedazo de hígado (aunque a veces así pudiera parecer), un dedo o la mitad del corazón. Nuestro cuerpo sigue funcionando como siempre. Así que, ¿de dónde viene?

Es entonces cuando nos ponemos a pensar que el vacío, todo el daño que sentimos, toda la tristeza y la desesperación que nos aquejan desde que ésa persona se fue, son obra nuestra. Nadie nos obliga a sentirnos así, es nuestra propia mente la que nos lleva a ello.

Y la cuestión es: ¿cómo dejar de sentirnos así? Las respuestas son muchas y ninguna es la correcta, excepto una. La respuesta que uno mismo se da. Conozco personas que aminoran el vacío acostándose con otras personas, practicando algún deporte, pintando, escribiendo, esculpiendo, cantando, bailando, jugando videojuegos, etc. Lo que para una persona funciona tal vez no funcione para los demás.

Pero lo cierto es que el vacío permanece. Nuestro mapa mental se siente incompleto y destrozado porque le falta una de las piezas principales. No importa qué tanto hagamos o dejemos de hacer para llenar ése vacío abismal, éste permanecerá hasta que la pieza que nos falta regrese... e incluso entonces puede permanecer, ya que las piezas faltantes suelen gastarse con el paso de los años, de modo que, cuando regresan, ya no encajan bien...