12.2.07

Revolution #6


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El cine ha comenzado su segundo siglo de vida. La evolución del mismo ha sido notable, desde los efectos especiales, hasta las técnicas de filmación. Sin embargo, ya sabemos que evolución no es lo mismo que revolución, así que, ¿qué podemos decir acerca de un momento revolucionario dentro del cine?

Al principio, la mayoría de las películas se enfocaban en la glorificación de ciertos valores como el amor, el valor, etc. La relación héroe-villano existía desde el principio, pero siempre terminaba con los héroes prevaleciendo y el villano sucumbiendo por sus propios antivalores.

Éste esquema funcionaba muy bien al principio, especialmente al término de la Segunda Guerra Mundial, debido a que en los Estados Unidos (país donde se encuentra el centro geográfico más prolífico en cuanto a producción de películas, aunque hoy en día compita contra otros lugares) se vivía una atmósfera de triunfo, de poderío. El público quería ver cómo los buenos vencían a los malos, puesto que éso era lo que se supone que sucedía en la vida real.

Sin embargo, las cosas cambiaron. Ciertos sucesos socioculturales afectaron la visión del público en general. Entonces la línea entre el bien y el mal se notó como realmente era: difusa y fácilmente borrable.

El momento más revolucionario dentro del cine internacional ha sido, sin duda, el lanzamiento de El Padrino. Es allí donde, por primera vez, el público se enfrenta con una historia contada desde el lado contrario, desde el lado fuera de la ley, desde el mundo de los gangsters y no en contra de él.

Como en todas las películas, Francis Ford Coppola nos muestra a héroes y villanos, solo que en éste caso la diferencia entre ambos es como en la vida real: mínima. En la vida real nadie es absolutamente bueno ni absolutamente malo, lo mismo sucede dentro de la trilogía del Padrino.

El público no volvió a ser el mismo. Gracias a ése acceso a un mundo hasta entonces desconocido, la gente comenzó a sentirse identificada con el que está fuera de la ley (en Estados Unidos gobernaba Nixon, así que el momento fue perfecto para que se diera éste fenómeno), con el personaje complicado, en vez del personaje lineal y plano.

Así surgió todo el cine de antihéroes. Desde Heat hasta V for Vendetta, desde Salton Sea hasta kill Bill, desde Pulp Fiction hasta Fight Club, desde Natural Born Killers hasta Donnie Darko, desde A Clockwork Orange hasta Matrix, desde Johimbo hasta Lady Vengeance...

Todo gracias a aquella generación de los setentas que incluía a Francis Ford Coppola, Martin Scorsese, George Lucas y Steven Spielberg. El Padrino fue la precursora, pero luego vino Indiana Jones (de Spielberg), Han Solo (de Lucas) y tantos otros personajes fuera de la ley con los que fácilmente nos identificábamos.

El más prolífico en cuanto a éstas películas fue Scorsese. The Last Temptation of the Christ, Gangs of New York, Raging Bull, Goodfellas, Taxi Driver, etc. La mejor película de 2006 (en opinión mía) fue The Departed, dirigida por Scorsese y que sigue ésta línea de vivir fuera de la ley, de traspasar las barreras del bien y del mal, de ser políticamente incorrectas. Aún está por verse si el Oscar se lo lleva Scorsese, puesto que ya se ha visto que, a pesar de que la gente se identifica con los personajes de una película y ésta está excelentemente realizada, otros intereses están de por medio a la hora de entregar la estatuilla.

Para terminar, los dejo con una canción interpretada por el gran maestro Johnny Cash. El señor Cash era un antihéroe para los Estados Unidos, un ser humano lleno de defectos que encontró el camino a la redención a través de la música. Fue el primer artista en atreverse a presentar un show en vivo en una prisión de alta seguridad al darse cuenta del íntimo contacto que sus canciones hacían con la gente dentro de ésos lugares. Precisamente ésta es una canción dedicada a la famosa prisión de Folsom. Disfrútenla.

MP3: Johnny Cash - Folsom Prison Blues

[Bonus]
MP3: Johnny Cash - A Boy Named Sue (Live at Folsom Prison)

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