Estoy seguro de que habrá mucha gente que considere que los videojuegos NO son cosas de nerds, así como estoy seguro que muchos dirán que otras cosas de las que hablamos aquí tampoco lo son. Quiero aprovechar para remarcar lo que dijimos al principio: las cosas de nerds son las cosas que nos obsesionan, que tienen una importancia monumental en nuestras vidas. Éstas son sólo algunas de ellas, no pretendo escribir artículos sobre autos, futbol, mujeres (bueno, sobre mujeres sí) y demás cosas que también obsesionan a la gente y que (sin embargo) no se consideran cosas de nerds.
Aceptémoslo, los videojuegos aún son considerados por mucha gente como algo muy nerd. Yo no sé qué tan cierto será éso, no es mi intención saber todo lo que piensa la gente.
Un videojuego es como cualquier otro sistema de información: tiene una entrada, un proceso y una salida. La entrada es, obviamente, a través de un control, el proceso se lleva a cabo dentro de las llamadas consolas y la salida es a través de una imágen computarizada y desplegada en una pantalla de televisión o a través de un proyector.
La entrada son todos los comandos que el juego recibe. Dependiendo del sistema de juego que se utilice (hoy en día hay bastantes opciones distintas), los comandos pueden ser presionar un botón, mover una palanca, jalar un gatillo, pisar un cuadro en un tapete o incluso mover el control hacia un lado o el otro.
El procesamiento de ése comando depende mucho del sistema que se utilice. Mientras leen ésto, consolas con procesadores más rápidos y más poderosos se están diseñando (o al menos éso nos hacen creer) en las principales corporaciones creadoras de videojuegos. Es una batalla que ya lleva algunos años entre Microsoft (y su Xbox), Sony (con su Playstation) y Nintendo (y su GameCube, su Nintendo DS y, más recientemente, su Wii). Yo soy de los que opinan que su competencia en realidad es un acuerdo pre-pactado que les permite a cada una tener un cierto auge y luego ser superada por la siguiente consola. Éso significa muchas ganancias para ellos y mucha necesidad de mantenerse a la vanguardia en videojuegos para nosotros.
También existen los videojuegos para computadora, que también requieren ciertas características para funcionar. Éso significa que, para jugar ciertos juegos, necesitas una computadora con mucha memoria, mucha velocidad de procesamiento y otras características. Por supuesto, éso también se traduce en un gasto para aquellos que desean poseer los juegos más innovadores (aunque de innovadores no tengan nada).
La salida es de lo que todos parecen olvidarse. Resulta que si uno no tiene una televisión de alta definición y un teatro casero digital, uno no puede disfrutar adecuadamente de su nuevo Xbox 360 o de su Playstation 3. Éso, señoras y señores, en mi tierra se llama MAMADA. Las imágenes de los juegos (las "gráficas") son cada vez más realistas, desde que supieron cómo manejar los polígonos con cada vez más ángulos. Obviamente éso es bueno para los videojugadores, pero significa un gasto muy cabrón para los que no somos estadounidenses y no tenemos el ingreso necesario como para comprar una TV de alta definición.
Lo único positivo de todo ésto es la oferta de juegos. Hay para todos los gustos. Desde inocentes juegos de aventuras con personajes de Disney para los más jóvenes, hasta juegos inspirados en películas superviolentas (como El Padrino y Reservoir Dogs), juegos de terror de supervivencia (como Resident Evil o Silent Hill), juegos de guerra (como Ghost Recon) o juegos de gatillero (o de balas, como muchos les llaman, como Grand Theft Auto o Black) para los mayores. Hay juegos de magia, de fantasía, de baile, de creación musical, de deportes (de cualquier deporte, de hecho, incluyendo deportes como ajedrez o pool), sexuales, psicodélicos, medidores de inteligencia, religiosos... de lo que se imaginen.
Ahora bien, hay otro aspecto de los videojuegos y es la forma en la que la gente ve su impacto en la sociedad. Me refiero a la opinión que la gente guarda de ellos. Mi familia, por ejemplo, nunca ha invertido en una consola porque piensan que es un gasto innecesario. Yo mismo pienso que no es una parte importante de mi vida (quizás inspirado por el hecho de que las únicas consolas con las que he jugado son consolas prestadas).
Aún así, hay mucha gente que aprecia sus bondades. Especialmente durante la niñez, los videojuegos pueden ayudar a acercar a la gente a la tecnología, a incrementar el desarrollo mental (siempre y cuando sea un juego que rete a la capacidad mental del individuo), a desarrollar el trabajo en equipo, etc. Es obvio que también tiene sus desventajas, especialmente cuando el individuo se obsesiona demasiado con los juegos y éso comienza a afectar su vida.
Por ejemplo, uno de mis sobrinos solía jugar conmigo Resident Evil 2 cuando tenía unos 10 ú 11 años. Rápidamente uno podía notar que su habilidad para resolver los acertijos o encontrar cosas ocultas se estaba desarrollando gracias al juego, sin embargo, resultó ser que unos meses después, empezó a tener pesadillas en las que un hombre entraba a su cuarto para arrancarle la cabeza.
Supongo que ésa es la barrera que uno debería dibujar siempre que se acerca a algo, a lo que sea. Uno debe detener la obsesión en el momento en el que la misma comienza a tener efectos adversos en nuestra vida diaria o en nuestra salud y paz mental. Por ejemplo, si consumen drogas (y que conste que no los estoy incitando a que lo hagan), deberían detenerse y pensar en dejarlas cuando éstas comienzan a afectar sus relaciones interpersonales o su manera de pensar... pero, ¿qué sé yo?
En conclusión, los videojuegos, igual que todas las cosas, tienen su lado bueno y su lado malo. Habrá quienes siempre saquen a relucir un lado o el otro. Uno tiene la responsabilidad de desarrollar un criterio lo suficientemente amplio como para estar abierto a ambos lados y después escoger uno propio.
Mientras tanto, yo disfruto mucho jugando Mario 64 en mi computadora, los juegos de pelea de Marvel, 2 de los muchos juegos de Resident Evil, entre otros. Estoy planeando comprar un PlayStation 2, lo que me permitirá conocer algunos juegos nuevos y, quizás, comenzar a publicar algunas reseñas o comentarios aquí como prometía el subtitulo de éste blog.
Entradas
No hay comentarios.:
Publicar un comentario