Ahí vamos
Sony BMG, 2006
Por extraño que suene, no siempre es bueno seguir las tendencias. Por un lado, la gente que está deseosa de más de éso a lo que ya está tan acostumbrada, se va a sentir muy a gusto recibiendo más frutos de ésa tendencia determinada. Por ejemplo, alguien que le gusta la música electrónica fría y sin sentimiento, va a sentirse muy bien escuchando discos de los djs más famosos del mundo. ¿Por qué? Pues porque son parte de ésa tendencia en particular. Si los pusiéramos a escuchar a Boards of Canada, no lo entenderían del todo, puesto que son parte de otra tendencia totalmente diferente.
Una tendencia dentro del rock es el uso de guitarras como base medular de las canciones. La tendencia apareció casi desde el inicio de la historia del rock, sin embargo ha tenido sus altibajos a lo largo de la misma. Últimamente, las guitarras habían sido reemplazadas por los sintetizadores, creando otra tendencia que gobernó por unos cuantos años. Aún así, ahora la tendencia vuelve a cambiar, gracias a algunas bandas y artistas (en su mayoría británicos) que han redescubierto las bondades del instrumento de las 6 cuerdas.
Y es que, cuando una banda o un artista sólo se aprovecha de una tendencia para ganarse una lana y robarse una rebanada del pastel, se nota. Al final de ésos discos te quedas vacío, sin sentir que has recibido algo. En algunos casos cada canción suena exactamente igual a las demás. Afortunadamente, éste no es el caso.
Gustavo Cerati nos ofrece un nuevo disco solista Ahí Vamos, que recuerda mucho su trabajo con Soda Stereo, incluso hay quienes dicen que es una respuesta al constante reclamo de una reunión de los miembros del desaparecido grupo argentino.
Desde los primeros segundos de Al fin sucede, podemos darnos una idea de con qué nos hemos encontrado. Las secuencias y los sintetizadores que eran tan comunes en sus discos anteriores, ahora han pasado a un plano inferior, sirviendo sólo para enmarcar las canciones y darles una personalidad más profunda.
Las canciones fluyen bastante bien y se siente una atmósfera rica de elementos. Éste no es un álbum frío y simple. Se alcanzan a escuchar las influencias como el sonido dark ochentero en Lago en el cielo, el ska disfrazado en Bomba de Tiempo y el sonido brit-pop en Al fin sucede. Asímismo, son buenísimas Crímen (el primer sencillo que no tiene mucho que ver con el resto del álbum), Me Quedo Aquí y Adiós.
Al terminar de escuchar éste disco uno se queda con varias impresiones. Una de ellas es que éste es el mejor disco solista de Cerati. Me resultaba ridícula la forma en la que la gente lo idolatra aquí en México (nunca fui muy fan de Soda Stereo), pero ahora creo que puedo unirme al culto sin sentirme culpable.
MySpace: www.myspace.com/ceratigustavo
MP3: Crímen
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